lunes, 29 de abril de 2013

La otra cara de las vacunas


Pontificia Universidad Javeriana
Lectoescritura
Camila Forero
Santiago Rivera
Johana Díaz
Profesora: Adriana Chacón
La Otra Cara de las Vacunas

“La ignorancia humana no permanece detrás de la ciencia, crece tan rápido como esta”,
bien lo expresaba Stanislaw JerzyLec (escritor judío polaco 1909-1966)  tan cierta como preocupante resulta dicha afirmación  muy conveniente para el objetivo del presente texto,  orientado  a debatir  un tema tan álgido como la vacunación cuyos efectos benéficos parecen ser bien conocidos, en cambio sus consecuencias  son ignorados por muchos.

Las vacunas se han relacionado con enfermedades autoinmunes, es decir que son causadas por la aplicación de las mismas. La esclerosis múltiple, por ejemplo, puede ser causada con influencia de vacunas, tal como lo explica el Doctor Juan Bravo Acuña:
“Se ha considerado que tanto la vacuna de la hepatitis B como la de la gripe podrían causar o exacerbar la esclerosis múltiple por la teoría de la similitud molecular. En el caso de la vacuna de la hepatitis B la asociación con la enfermedad se debe sobre todo a un experimento en ratones, a los que se les inoculó una vacuna de la hepatitis B que contenía una proteína similar a la proteína básica y en varios de ellos les provocó una encefalitis (inflamación) autoinmune.
Además, algún estudio científico publicado en Francia, mostró un leve aumento de la incidencia de esclerosis múltiple entre los vacunados, lo que llevó a las autoridades sanitarias francesas a detener de manera temporal su programa de vacunación de escolares. También la vacuna de la gripe se ha asociado a la esclerosis múltiple porque el virus de la gripe tipo A tiene alguna coincidencia con la proteína de la mielina y porque la infección natural por el virus de la gripe puede aumentar los síntomas en pacientes con esclerosis múltiple.” (DR Juan Bravo Acuña, 2010).
A pesar que los estudios científicos se encuentran aun en el dilema de la culpabilidad o no de las vacunas, resulta increíble la facilidad con que las industrias y un sector de la investigación científica pueden ocultar y/o camuflar  estadísticas como: cada año 36.000 personas mueren de gripe en Estados Unidos, (OMS, 2010), debido al inadecuado uso de la  información esta queda oculta para la población. Este problema debe ser resuelto, porque independientemente que las vacunas sean dañinas o no, si ayudan a la prevención de algunas enfermedades, y las personas se deben seguir vacunando para prevenir epidemias o pandemias.

La corrupción de  los gobiernos  o  líderes políticos, lamentablemente también se presenta en  las instituciones científicas e investigativas. Si bien en teoría están “al servicio de la humanidad” esto es claramente contradictorio con las acciones o más bien con las omisiones realizadas por éstas instituciones, ¿Cómo es posible que puedan ocultar cifras en las cuales  dos de cada cinco niños mueren al año por el uso de jeringas reutilizadas en diferentes centros médicos o información extremadamente preocupante como que muchas vacunas causan trastornos y enfermedades crónicas a nivel mundial? (Leon Ochiai R et al. Astudy of thypoid fever in five Asian countries: disease burden and implications for controls.Bulletin of the world health organization, 2008)

Todo esto es simplemente indignante, pero más  aún, que ni siquiera un tercio de la población es consciente de esto y lo peor es que aumenta su ignorancia al creer toda la “propaganda” y promoción hecha por las industrias médicas  con respecto a este tema, mostrando muchas ventajas y pintando un panorama donde todo es color de rosa, siendo estas industrias conscientes de que la realidad es totalmente diferente; claramente tal vez para estos tiempos de corrupción todo si es perfecto  porque con cada persona inconsciente que se una a las miles engañadas ellos ganan grandes cantidades de dinero, de beneficios y de comodidades, a fin de cuentas “¿Qué importa la gente?”....

Cada año se administran cerca de mil millones de inyecciones a mujeres y niños a través de los programas nacionales de inmunización disponible en los países, esto quiere decir que todas estas personas están en un gran riesgo de adquirir enfermedades por dos factores ya mencionados: falta de información y ausencia de prácticas de higiene por parte de los centros médicos. Ahora bien, es de resaltar  que estos programas son ofrecidos por los gobiernos de los países en “pro” del bienestar ciudadano, en “pro” del desarrollo, cabe preguntarse si al igual que las instituciones clínicas, el gobierno se enriquece a costa de la salud de sus ciudadanos.

Debido a que el presente texto no está encaminado a generar una crítica en cuanto a lo político se refiere y a pesar de que este ámbito siempre salga involucrado cuando se habla de corrupción, es menester encaminarse a lo que nos compete, esto es la desinformación de la población. Se ignora por muchos que las vacunas, no solo por la falta de higiene sino por la mala aplicación o simplemente por la elaboración de las mismas, suelen agravar la gripe común, también se ignora que pueden causar accidentes cardiovasculares isquémicos llegando a provocar el envejecimiento prematuro.( The Jordan report: accelerated development of vaccines, 2007. U.S.)

Dado el nivel de ignorancia del “pueblo”(si cabe utilizar el término), este cree que estas enfermedades  ocurren por cualquier motivo menos por causa de las vacunas, es más que las vacunas son la solución a dichos padecimientos, que “porque el médico lo dice” o porque “el tal laboratorio clínico” lo dice es verdad en vez de cuestionar  de manera un poco lógica la situación, en lugar de informarse bien sobre los tratamientos que va a pagar, las vacunas que se va a aplicar el lugar donde se las va a aplicar, todo esto inhibido por la ignorancia causada , aumentada por el gobierno ,  las industrias clínicas y de investigación.

Cabe resaltar que la ignorancia no solo se refiere a las personas que necesitan de la vacunación, sino que esta incluye a los agentes de la salud, ya que, ¿cómo es posible que realicen estas vacunaciones sin el menor de los cuidados, sin preocuparse por la salud de las personas?. Además no únicamente  es el hecho de reutilizar las jeringas (que es lo más grave), sino que, cuando  las desechan, no tienen la precaución de hacerlo adecuadamente, las botan por ahí sin prever que posiblemente alguien se puede punzar un dedo y contraer así cualquier enfermedad.

La  negligencia médica,  bien sea por ahorrar y ganar dinero, o por actuar de mala fe, acompaña dicha ignorancia, lo importante es que se debe tomar una conciencia sobre este hecho social, que afecta a la población mundial, niños, jóvenes, adultos, ancianos, a todos. Es indispensable informarse y conocer la procedencia de cada vacuna y de cada tratamiento que se vaya a realizar en  la persona.

La cuestión  ahora, es tratar de salir de esa ignorancia como sea posible, por ejemplo, en el estudio realizado por la OMS y UNICEF en 1994 en Rumania, donde se encontró que las jeringas utilizadas en la vacunación eran reutilizadas, las revendían empaquetadas, utilizando hierro caliente para resellar el ensamblaje, se recomendó y se comenzó a implementar el uso de jeringas autodestruibles (OMS 2010), para evitar estos problemas de higiene y salud.

No se trata exclusivamente, de informarse sobre lo que está ocurriendo con las vacunas, sino que  también se trata de encontrar un solución a estos problemas, que no solo nos beneficiaran a nosotros, sino que también a las futuras generaciones, aunque de no encontrarla,las personas se verían gravemente afectadas porque esta dificultad seguiría creciendo hasta convertirse  en algo irreparable y traerá consecuencias mucho peores de las que nos ha traído hasta ahora. La OMS, UNICEF y todas aquellas entidades de salud, han ido implementando las soluciones, pero la población también debe ponerse en la tarea de buscar alguna forma de resolver estos hechos sociales.





Bibliografía

OMS,UNICEF,Banco mundial(2010).Vacunas e inmunización situación mundial.Ginebra.OMS
The Jordan report: accelerated development of vaccines, 2007. U.S.

Leon Ochiai R et al. Astudy of thypoid fever in five Asian countries: disease burden and implications for controls.Bulletin of the world health organization, 2008

Levine M et al., eds. New generation vaccines, 3rd ed. Marcel Dekker, 2004.
Dr. Juan Bravo Acuña. (31 de Mayo de 2010). Vacunas, alergia y enfermedades autoinmunes. , de http://www.vacunas.org/index.php?option=com_content&task=view&id=1367&Itemid=268

1 comentario:

  1. Estimados Santiago, Johanna y Camila,
    Si bien el texto de ustedes trata un tema de la mayor importancia, no consigue cumplir con el propósito trazado: debatir los beneficios y consecuencias de las vacunas. Hay redundancia: por ejemplo, se repite la idea de "ignorancia", aunque no se explica con claridad sobre qué. Y se percibe ambigüedad, pues al final uno no sabe qué vacunas deben aplicarse y cuáles no. Su nota de texto publicado es 1.4/2.0

    ResponderEliminar